

19 de marzo de 2018
Hoy ha venido al laberinto una visita especial, la Christine de El camí del laberint des de Girona. Con ella marcamos el dibujo y hoy ha venido a construir junto a mi un trocito de camino.
Me dijo una cosa muy cierta: “como encajan las piedras entre ellas”. Y es cierto, cuando vas haciendo el trabajo de ponerlas unas junto a las otras, encima debajo, en los agujeros y rincones te das cuenta que encajan, que se acoplan fácil para formar un pequeño muro.
Con su visita me regaló una foto de mi trabajando en el laberinto, gracias!
Y seguimos adelante con su construcción ya a las puertas del equinoccio de primavera.
Ahora mismo el día y la noche duran lo mismo. Tenemos las mismas horas de luz y de oscuridad pero de viaje hacia más horas de luz. El ciclo en constante cambio.




El pequeño rincón del mar va acumulando piedras azuladas y además añadimos conchas preciosas que distintas personas han regalado a este laberinto.

